jueves, 29 de enero de 2015

UN NUEVO ENCUENTRO CON MIS AMIGOS GALLEGOS

EL 5 DE ENERO DEL 2015 UN NUEVO ENCUENTRO CON MIS AMIGOS GALLEGOS

Cuando tocó el timbre y pregunté quién era, me respomdieron con un "¡Soy Noé!" me quedé sin habla, aunque después la recobré. Les invité a entrar al comedor, cuando en mitad del camino me pidieron que encendiera la luz para llegar al comedor, allí Noé me presentó a su hijo y tocayo, casi tan alto como su padre, aunque tiene once años. Empezamos a recordar viejos tiempos llenos de buenos momentos y simpáticas anécdotas, en las cuales salió el nombre de otro amigo gallego. Juanjo vive en Vigo, así que optamos por hacer una llamada telefónica con manos libres para charlar los tres amigos de la infancia. Después de veinte minutos de risas y charloteo, Juanjo me felicitó por estas fiestas navideñas y tuvo que volver a sus haceres. Coincidiendo con el encuentro amistoso de estos dos compañeros, Noé me contó un poco de historia de Galicia, empezando por los comiezos de los Celtas en las islas Británicas, de como los celtas gallegos invadieron las islas y transmitieron su cultura, esta historia recogida en el Leabhar Ghabhála Érenn (libro de las invasiones Celtas en Irlanda) me sorprendió muchísimo, ya que es una historia chula que recomiendo leer a todo el mundo.

Como empecé a tener hambre, Noé hizo un inciso en la gastronomía gallega, desde el pulpo a feira al marisco se me hizo la boca agua. Fue una sorpresa para mi el averiguar que se come del percebe ¡es el pene! lo que me recordó todos los que me había comido en Galicia el año antes del accidente. Fue una experiencia maravillosa el conocer esas tierras, algo que siempre tengo en mente son las tapas "tapazas" gratis que te daban por consumición, Noé me explicó que en Galicia, durante las fiestas, la gente sale a tomar vinos por la tarde y con el tapeo ya cenan. Fueron muchos los detalles que me contó, pero deben ser los lectores que descubran las maravillas de las tierras gallegas.

Eu tamen teño morriña de Galicia...

E con unha gaita e un chupito de queimada, hasta a próxima quedada.